Hoy les ofrecemos una de las películas más destacadas del cine primitivo norteamericano realizada por Edwin S. Porter, director de la famosa Asalto y Robo de un Tren (1903).
The Kleptomaniac resulta interesante por dos motivos. En primer lugar por ser uno de los primeros ejemplos más claros de cine de denuncia social, ya que el argumento de la película deja en evidencia las injusticias del sistema penal: la mujer de clase alta que es atrapada robando sale indemne de su crimen, mientras que la de clase baja que ha robado para alimentar a sus hijos acaba mucho peor parada. En segundo lugar por la voluntad de narrar dos historias paralelas para contrastarlas. Es decir, el film cobra sentido mediante la comparación que hace el espectador entre ambas historias (y en todo caso, si había algún espectador despistado, el rótulo final con la balanza de la justicia desnivelada lo dice todo). Desde nuestra mentalidad actual hubiéramos preferido un montaje paralelo en que se narraran los dos robos al mismo tiempo, pero obviamente no podíamos pedir algo así en 1905.
Las limitaciones de la realización de Porter quedan de manifiesto sobre todo en la escena del robo en la tienda por parte de la mujer de clase alta. Al estar filmada en un plano general, el espectador corre el riesgo de perder de vista el momento del robo, de no ser por los gestos de otros visitantes de la tienda que miran a la ladrona con desconfianza.
Uno de los primeros ejemplos que conozco de cine con voluntad social.